Mª del Carmen Utrera Recio
y Francisco Vázquez Muñoz

Francisco

Nací debajo del puente de Triana, en las “chozas del barranco”, un 31 de diciembre en la última “Campaná”, por lo cual lo celebro con uvas en vez de con tarta. Llegué al Barrio del manchón con 7 años y aquí sigo en San Juan con 73, “casi ná”. Fíjate si ha llovido que me pilló la riada del año 1955 y salimos nadando como pudimos. También recuerdo como me buscaba “las habichuelas” asistiendo a catequesis, que en aquel entonces la daba la hermana Teresa de Regina Mundi que era la directora, y mi único interés por la catequesis era recibir la “rebaná” que daban de merienda por asistir.

Echo de menos la generosidad que teníamos cuando éramos más jóvenes y ahora les digo yo a ellos no olvidéis nunca el respeto por los mayores.

Con catorce años empecé a trabajar en una fábrica de ladrillos de Castilleja de Guzmán y con dieciséis conocí a la mujer de mi vida con la que me casé y tenemos cuatro maravillosos hijos dos hembras y dos varones. Mejor compañera ni en sueños como la que tengo no pude encontrar, ella es mi más bonita realidad (se emociona), a día de hoy no la cambio por “ná”, no sé lo que ella os contará… (Comenta entre risas).

Mª del Carmen

Pues yo digo que lo mismo que te quiero mi Francisco, con locura.

Tengo 72 años con 13 me vine a San Juan de Aznalfarache, aquí he tenido las alegrías más grandes de mi vida y también las mayores penas. Pero no dejaría mi pueblo por “naita” del mundo. Viviendo seguimos en la que fue la casa de mi abuela. Yo trabajé en el almacén de aceitunas de don Pedro Lisén. Hemos sido tan comerciantes los dos que a día de hoy todavía vendemos aceitunas en la puerta de nuestra casa. ¡No encontrareis otras mejores!